
Vivimos el todo vale, si es para conseguir lo que se desea y si recibimos algo a cambio bien estamos donde estamos, la mayoría vive de subvenciones, la iglesia, los sindicatos, el mundo del cine, las asociaciones, etc. todos viven de la leche de una vaca a la que nadie se atreve a decirle nada, aunque nos mee encima, no vaya a dejar de darnos nuestra ración de leche.
Acaso no deberíamos echar de menos, a esos estudiantes, que por naturaleza deben ser rebeldes y estar contra lo establecido, a esos sindicatos que busquen una independencia económica, abanderando una lucha más profunda por el trabajador, una justicia, que realmente beba de los principios de poderes independientes, al no esperar que los nombren los políticos, ni que éstos les asignen un presupuesto x o y.
Tal vez ….
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